Es obligatoria una pensión compensatoria divorcio?
Algunas veces escuchamos sobre las consecuencias directas de la separación de las parejas casadas y el tema económico suele ser uno de los principales protagonistas, la pensión compensatoria divorcio suele requerirse cuando alguna de las partes pierde posicionamiento o comodidad en cuanto a su nivel y condiciones de vida.
A pesar que suena sencillo, la determinación del derecho a recibir la mencionada pensión depende de muchas variables, pues como he escrito, la pérdida de condiciones de vida o comodidades tal y como cuando se estaba dentro del matrimonio puede ocurrir o no y puede originarse por muchas causas.
Básicamente, cuando una de las partes queda con la custodia de los hijos en común, esto supondrá una serie de gastos que ya no serán sostenidos por marido y mujer. Todos estos gastos demostrables son susceptibles de analizarse cuando se está determinando la cuantía de la pensión compensatoria siempre que se haya determinado que tiene lugar.
Ahora bien, la pensión alimentaria difiere de la pensión compensatoria, pues la primera tiene el objetivo de brindar las condiciones mínimas en cuanto a sustento alimentario a los hijos y de hecho es prioritaria respecto a la compensatoria, tanto así que si la parte obligada no cuenta con la capacidad económica de sostener ambas, deberá sostener al menos la alimentaria.
Volviendo a la pensión compensatoria esta puede extinguirse una vez que la parte que la recibe, ha mejorado de forma comprobable su situación económica. Reciente el divorcio los cambios que se desencadenan suponen una desmejora en la mayoría de los casos, con el tiempo esto pudiese mejorar sea porque el acreedor ha logrado emplearse o se ha vuelto a casar entre otras razones.
Cada caso supone una cantidad de circunstancias que conforman su contexto y por tanto, la situación de cada una de las partes. Para llevar de forma atinada todo el proceso, la búsqueda del consejo de especialistas en estos temas es fundamental.
A pesar que estos procesos pueden ser bastante antipáticos, los cambios en la vida ameritan que nos resguardemos, sobretodo si no hemos aprovechado el tiempo para prepararnos o trabajar y forjar una reputación como profesionales.