El proceso de tratamiento aguas residuales
La sociedad ha visto grandes avances tecnológicos en los últimos siglos, gracias a los cuales las personas pueden vivir de manera más cómoda facilitando sus tareas diarias y teniendo incluso mayores opciones de entretenimiento. Sin embargo, esto también ha traído grandes consecuencias al medio ambiente, las cuales afectan incluso a los recursos naturales de los cuales dependemos. El agua no es la excepción, y como respuesta a los índices de contaminación de la misma, se han buscado métodos para poder aprovecharla al máximo, algo que incluye el tratamiento aguas residuales, lo que permite purificar este líquido en especial cuando no presentan grandes índices de contaminación.
En muchos países, en especial en aquellos donde escasea el agua potable, se toman medidas para aprovechar al máximo este líquido, una de ellas es reutilizarlo una segunda e incluso tercera para lavar pisos o para regar plantas, cuando el agua solo tiene jabón, esto se hace para extender su tiempo útil antes de ser arrojada al drenaje y que se mezcle con otros contaminantes, momento en el que emprenderán su camino hacia las plantas de tratamiento, para eliminar cualquier tipo de contaminante y que el agua pueda reutilizarse, devolviéndola a su cauce y aprovechando la materia orgánica que se haya separado en el proceso, para crear composta o biogás.
Mejorando el tratamiento de aguas residuales
Para los gobiernos de muchos países y personas dedicadas al medio ambiente, las aguas residuales obtenidas de procesos industriales son un tema preocupante.
Aunque cada vez más empresas en el mundo se hacen responsables de los contaminantes que arrojan a las aguas y aplican protocolos para darles el tratamiento apropiado, aún existen industrias que no cuentan con un sistema para lidiar con las aguas residuales que producen, e incluso existen contaminantes que difícilmente pueden eliminarse.
Por lo anterior, las investigaciones en este campo continúan enfocadas en encontrar procesos y materiales para mejorar el tratamiento de aguas residuales, aun cuando tengan una importante carga de agentes contaminantes, entre ellos pesticidas, aceites industriales y componentes difícilmente biodegradables.
Para poder separar los contaminantes, el agua pasa por distintas etapas o filtros, en cada una de ellas se eliminan diferentes componentes, a través de procesos como el cambio de temperatura, tratamientos físico para separar cualquier contaminante suspendido en el agua que pueda ser eliminado mediante flotación o decantación, pero también, hay tratamientos químicos que ayudan a eliminar residuos de procesos químicos industriales, obteniendo agua con suficiente pureza para ser devuelta a ríos o lagos.